martes, 10 de marzo de 2009

Confesiones de la llamada tercera edad.

Quizá nadie de mi edad se atreva a confesarlo, temiendo las posibles consecuencias de esta verdad, pero:

Muchas de las personas "mayores" no necesitan el asiento que se les cede en el subterráneo o en un ómnibus.

2 comentarios:

  1. Quizás no lo necesiten, pero es una cuestión de cortesía elemental y de respeto.

    ResponderEliminar
  2. Acerbus, eso está más que claro. Si hasta yo misma le he cedido el asiento a personas más grandes!

    ResponderEliminar